por Christian de Groote, arquitecto
Este sueño debe refrescar en verano y proteger en invierno, limpìar ruidos y sanar costras. Hacer a todos partícipes, igualar el condominio con la población, los departamentos con los cités, los paseos con los campamentos, hacer de Santiago un enorme conglomerado de vecinos, de ciudadanos.
............. cada ciudadano un árbol, miles de árboles, millones de árboles, todos iguales, como tilos o plátanos orientales......... Un sueño para Santiago tiene como condición no exluir a nadie, desdibujar clases sociales, emparejar diferencias, fundir los balcones altos de la ciudad con los bajos, hacer uno el norte con el sur, borrar los bordes de la ciudad, elevar culturalmente tanto al culto como al ignorante. Una ciudad que venza la degradación y la asfixia, con la protección natural de un gigantesco manto verde." El Mercurio, Artes y Letras, 30 dic. 2007
Éste es un sueño de Christian Groote, un sueño en el que lo acompaño con gusto y ganosa de trabajar en su construcción.
Para realizar el sueño de este arquitecto es necesario convertir los campamentos en viviendas dignas (no mediaguas, por favor, no casas Copeva que además de mezquinas son horribles).
Para realizar el sueño de este arquitecto es necesario repensar el paisaje, volver a nuestro paisaje madre y plantar con especies autóctonas (no plátanos orientales por favor, que producen alergia a muchos).
Para realizar el sueño de este arquitecto es necesario replantearse quién es ignorante, en qué materias, y por qué y, dignificando a ese ignorante, encontrar la veta de sabiduría que ese ignorante puede tener.
Para realizar el sueño de este arquitecto es necesario educar a las personas en el valor de lo vegetal, en la inmensa riqueza que el mundo vegetal nos entrega en cada instante sin que nos percatemos de ello y sin apreciarlo.
Sólo después de este ejercicio podemos empezar a plantar árboles por doquier en la seguridad de que no serán maltratados, olvidados, muertos antes de alcanzar a hojecer por falta de una jarra de agua o porque un transúnte travieso lo tronchó.
Teresa de Jesús.
............. cada ciudadano un árbol, miles de árboles, millones de árboles, todos iguales, como tilos o plátanos orientales......... Un sueño para Santiago tiene como condición no exluir a nadie, desdibujar clases sociales, emparejar diferencias, fundir los balcones altos de la ciudad con los bajos, hacer uno el norte con el sur, borrar los bordes de la ciudad, elevar culturalmente tanto al culto como al ignorante. Una ciudad que venza la degradación y la asfixia, con la protección natural de un gigantesco manto verde." El Mercurio, Artes y Letras, 30 dic. 2007
Éste es un sueño de Christian Groote, un sueño en el que lo acompaño con gusto y ganosa de trabajar en su construcción.
Para realizar el sueño de este arquitecto es necesario convertir los campamentos en viviendas dignas (no mediaguas, por favor, no casas Copeva que además de mezquinas son horribles).
Para realizar el sueño de este arquitecto es necesario repensar el paisaje, volver a nuestro paisaje madre y plantar con especies autóctonas (no plátanos orientales por favor, que producen alergia a muchos).
Para realizar el sueño de este arquitecto es necesario replantearse quién es ignorante, en qué materias, y por qué y, dignificando a ese ignorante, encontrar la veta de sabiduría que ese ignorante puede tener.
Para realizar el sueño de este arquitecto es necesario educar a las personas en el valor de lo vegetal, en la inmensa riqueza que el mundo vegetal nos entrega en cada instante sin que nos percatemos de ello y sin apreciarlo.
Sólo después de este ejercicio podemos empezar a plantar árboles por doquier en la seguridad de que no serán maltratados, olvidados, muertos antes de alcanzar a hojecer por falta de una jarra de agua o porque un transúnte travieso lo tronchó.
Teresa de Jesús.
