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domingo, 18 de mayo de 2008
He estado pensando acerca del problema que se nos ha creado desde que la mujer empieza a ser considerada persona con iguales derechos al hombre. Lo mejor que se nos ha ocurrido ha sido mencionarla antes o después de éste. Y decimos: La niña y el niño, el obrero y la obrera, el alumno y la alumna. Como me cansé de este subterfugio, propongo que de aquí en adelante digamos les niñes, les obreres, les alumnes. Digamos les hermanes en vez de los hermanos cuando se trata de hermanas y hermanos Diríamos les hijes, les compañeres. Voy a ensayar en este blog a ver cómo funciona. Estoy segura de que será mucho más claro.... una vez que nos acostumbremos. Hay que considerar lo reacios que somos a los cambios, lo que nos duele deshacernos de viejas costumbres, de viejos zapatos, de viejos rencores......
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Publicado por teresa de jesus a las 20:55 | Permalink |


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